Metatérminos

    Spam

    Definimos como spam cualquier tipo de mensaje o forma de comunicación digital indeseada, no solicitada y, generalmente, molesta para el receptor. Es muy común hablar del spam que recibimos en el correo electrónico, pero también podemos verlo en mensajes de texto, llamadas o en redes sociales. En el mejor de los casos, el spam puede ser solo un intento torpe de publicidad, pero en otros, es una forma de estafar a la gente.

    En cuanto a su etimología, la palabra spam en el contexto digital nació en los años 70, cuando los comediantes británicos Monty Python realizaron un sketch cómico en el que el término Spam, que era la marca de una carne enlatada, se repetía hasta la saciedad. Esta repetición excesiva y molesta se asoció más tarde con la práctica de enviar grandes cantidades de mensajes no deseados por correo electrónico.

    A la acción de mandar spam se le denomina spamming, en inglés, o espamear en español.

    ¿Cómo identificar los mensajes de spam?

    Los usuarios estamos continuamente expuestos a estafas en línea, incluyendo las que recibimos a través de spam. Si bien nos solemos dar cuenta rápidamente de cuando algo es o no fiable, hay veces que nos puede pillar con la guardia baja. Te damos algunos consejos para que te fijes a la hora de detectar mensajes de spam:

    • Revisa el remitente: Si el remitente del correo electrónico es desconocido o parece sospechoso, es probable que sea spam. Presta especial atención a direcciones de correo electrónico extrañas o con errores ortográficos.
    • Desconfía de los enlaces: Si el correo electrónico contiene enlaces que te piden que hagas clic en ellos, asegúrate de verificar la autenticidad del enlace antes de hacerlo. Pasa el cursor sobre el enlace (sin hacer clic) para ver la URL real a la que te llevaría. Si parece sospechosa o no coincide con el sitio web que esperabas, es mejor no hacer clic.
    • Atención a los adjuntos: Evita abrir archivos adjuntos de correos electrónicos sospechosos, especialmente si provienen de remitentes desconocidos. Los archivos adjuntos pueden contener malware o virus con el objetivo de dañar tu ordenador o de extraer información confidencial.
    • Fíjate en el contenido: El spam a menudo contiene errores gramaticales o de ortografía, así como un lenguaje excesivamente promocional o alarmista. Si el contenido parece poco profesional o no tiene sentido, es probable que sea spam.
    • Sospecha de las solicitudes de información personal: Si el correo electrónico te pide que proporciones información personal o financiera, como contraseñas, números de tarjeta de crédito o información de cuenta bancaria, es probable que sea un intento de phishing. Las entidades legítimas rara vez solicitan este tipo de información a través de correo electrónico.
    • Usa filtros antispam: Configura filtros antispam en tu cuenta de correo electrónico para filtrar el spam automáticamente y mantener tu bandeja de entrada más limpia y segura.

    Ejemplos de spam

    Algunos ejemplos de los mensajes de spam con ánimo de estafar más comunes que podemos encontrar en nuestra bandeja de correo electrónico son los siguientes.

    • Correos electrónicos de phishing: Mensajes que suplantan la identidad de instituciones bancarias, compañías de servicios en línea o empresas conocidas, solicitando credenciales privadas como contraseñas, números de tarjeta de crédito o cualquier otro tipo de información bancaria.
    • Ofertas de productos o servicios no solicitados: Correos electrónicos que promocionan productos o servicios, muchos de utilidad inverosímil, como píldoras para adelgazar, suplementos nutricionales, préstamos rápidos, o productos para mejorar el rendimiento sexual, entre otros.
    • Mensajes de loterías falsas: Correos electrónicos que afirman que has ganado una lotería internacional o un premio en efectivo, pero para reclamar el premio, debes proporcionar información personal o pagar una tarifa.
    • Mensajes de amor o romance: Correos electrónicos que intentan establecer una relación personal o romántica contigo, generalmente con el objetivo de estafarte o robar información personal.
    • Notificaciones de herencias o legados: Correos electrónicos que afirman que has heredado una gran suma de dinero de un pariente desconocido y te piden que realices pagos para reclamar la herencia. Un timo muy famoso y manido de este estilo es el del príncipe nigeriano.
    • Correos electrónicos con malware: Mensajes que contienen archivos adjuntos o enlaces maliciosos que pueden infectar tu computadora con malware, como virus, troyanos o ransomware. El objetivo de estos virus son robarte tus contraseñas, espiar tu actividad en línea o controlar tu ordenador de forma remota.

    ¿Por qué recibo spam?

    Principalmente, recibes spam porque tu dirección de correo electrónico está disponible públicamente, de forma autorizada o no. Los spammers recopilan direcciones de correo electrónico a partir de diversas fuentes, como listas de correo compradas o bases de datos filtradas de otros sitios web. 

    En no pocas ocasiones, las empresas en las que te has registrado venden información a terceros. Esto puede pasar cuando te registras en cualquier sitio web, al participar en sorteos en línea o al suscribirte en newsletters.