Aprendizaje basado en proyectos: principios y ejemplos

El aprendizaje basado en proyectos (ABP) es una metodología educativa mediante el cual los alumnos aplican sus conocimientos y habilidades de forma práctica a través de la realización de proyectos. En este método, los estudiantes trabajan en proyectos que abordan problemas o preguntas complejas. En estos proyectos se trabajan las dotes de investigación, la colaboración y comunicación entre miembros de equipo, así como la creatividad y la lógica para resolver problemas complejos con soluciones innovadoras. Se trata, pues, de una metodología eminentemente práctica.

El ABP se aleja del aprendizaje más tradicional y pasivo, donde los estudiantes memorizan información sin una aplicación práctica clara. En pleno contraste, su fin consiste en desarrollar habilidades prácticas y promover el pensamiento crítico y la resolución de problemas. Los proyectos pueden abarcar diversas disciplinas y áreas temáticas. Son un medio excelente para que los estudiantes exploren sus propios intereses y descubran otros nuevos a la par que adquieren conocimientos y habilidades esenciales para su futuro.

Al tratarse de una metodología que persigue romper con las desventajas de la enseñanza tradicional, es ideal para introducir las tecnologías educativas en el aula, especialmente en lo que se refiere a herramientas colaborativas.

Principios del ABP

En el aprendizaje basado en proyectos distinguimos 6 principios rectores que marcan la metodología que cualquier docente debe observar a la hora de implementarlo en sus clases:

Valor práctico

Los proyectos deben tener una aplicación práctica real y significativa en la vida personal, social o profesional de los estudiantes. Es decir, no solo deben abordar problemas teóricos, sino que también deben ser relevantes en contextos del mundo real. Con ellos, los estudiantes deben ser capaces de desarrollar habilidades aplicables en situaciones cotidianas o en su futuro profesional.

Razonamiento crítico 

Uno de los objetivos del ABP es retar a los estudiantes a que investiguen, analicen y evalúen información de diversas fuentes. Es recomendable que los proyectos sean transversales y que abarquen varias disciplinas, lo que les permite a los estudiantes desarrollar habilidades de pensamiento crítico al tratar con problemas complejos. Este enfoque ayuda a los estudiantes a aprender a seleccionar información mediante el cuestionamiento y el análisis crítico, habilidades que son imprescindibles en la sociedad actual.

Aplicación de habilidades

Los docentes deben diseñar proyectos que representen oportunidades para que los estudiantes pongan en práctica habilidades demandadas en el mercado laboral. Algunas de estas habilidades son la organización, la comunicación efectiva, la gestión del estrés y el uso competente de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC). Al enfrentarse a desafíos del proyecto que requieren estas habilidades, los estudiantes se preparan para ser profesionales competentes y adaptarse a entornos de trabajo dinámicos.

Exploración

Todos los proyectos incluyen un período en el que los estudiantes puedan explorar datos y fuentes diversas. Esta fase de investigación y recopilación de información prepara a los estudiantes para crear soluciones con fundamento de cara al problema planteado. La presentación posterior de los resultados refleja y sirve para evaluar la capacidad de exploración de los estudiantes, así como su capacidad para sintetizar y comunicar de manera clara lo que se ha descubierto en el proceso de investigación y las conclusiones que se hayan extraído.

Colaboración

Otro gran objetivo de los proyectos es fomentar la interacción entre los estudiantes y promover canales de comunicación fluidos. La colaboración no solo se limita a la interacción entre compañeros, sino que también abarca la relación alumno-docente. La participación activa del profesor en el proceso de aprendizaje refuerza la experiencia educativa, permitiendo que los estudiantes desarrollen habilidades sociales y de trabajo en equipo con sus iguales y con figuras de autoridad (en este caso, el docente).

Evaluación

Por un lado, se espera que los estudiantes adquieran la capacidad de autoevaluarse para comprender su dedicación y la idoneidad de su trabajo. Por otro lado, el docente debe valorar periódicamente el progreso de los estudiantes y establecer indicadores de rendimiento claros para que la retroalimentación entre los estudiantes y el docente sea continua, mejorando los frutos de esta metodología.

Cómo implementarlo en el aula

Si queremos crear una actividad colaborativa en la que se aplique el aprendizaje basado en proyectos, es necesario respetar a rajatabla los principios anteriormente nombrados, que sirven de guía para crear proyectos que aporten un valor real al alumnado. Sin embargo, en EducaOpen, al ser una institución educativa volcada en las nuevas tecnologías, vamos un poco más allá y abogamos por la implementación del ABP de la mano de la tecnología.

En primer lugar, es esencial que los proyectos estén diseñados de manera que aprovechen las herramientas tecnológicas disponibles para promover la investigación y la colaboración. La utilización de plataformas en línea y otros recursos en línea amplían las fronteras del aprendizaje hasta límites insospechados, especialmente en calidad de fuente inagotable de información.

Más allá de la etapa de investigación, las tecnologías también pueden y deben incorporarse como medio de presentación de resultados. Actualmente, existen muchas herramientas como Genially o PowerPoint con las que miles de personas crean presentaciones digitales que incluyen contenido multimedia e interactivo.

El aspecto que cobra más importante de las TIC en el aprendizaje basado en proyectos reside en la colaboración. El paquete office, al igual que otras muchas herramientas de organización como Trello, fomenta que los estudiantes participen en tareas cooperativas en la que cada uno aporte su granito de arena. En cuanto a los canales de comunicación, se pueden introducir canales de comunicación como Discord o Slack.

Ejemplo de aprendizaje basado en proyectos

Te mostramos algunos ejemplos de proyectos colaborativos que se rigen por esta metodología para que puedas inspirarte:

• Soluciones tecnológicas para la educación a distancia: En este proyecto hipotético, los estudiantes podrían investigar las necesidades y desafíos de la educación en línea, explorando diferentes plataformas y herramientas, y colaborando para desarrollar propuestas innovadoras que mejoren la experiencia educativa en un entorno virtual.
• Historia local de la comunidad: Este proyecto consistiría en una inmersión en la historia local utilizando la tecnología como herramienta. Se invita a que los estudiantes exploren archivos digitales, entrevisten a residentes mayores y colaboren entre ellos para crear presentaciones multimedia que relaten la historia de su comunidad.
• Emprendimiento social para la inclusión: Un proyecto centrado en el emprendimiento social en el que se traten problemas de inclusión en la comunidad. En primer lugar, los estudiantes explorarían datos sobre grupos marginados. Después, extraería conclusiones y formularían soluciones creativas para mejorar la inclusión y colaborar en la implementación de estas con otros agentes sociales.